En la conferencia celebrada en Domus Academy, Eric Kessels explica cómo la adopción de una mentalidad amateur, la imperfección y la experimentación lúdica desencadenan la verdadera innovación en la publicidad, el diseño y otros ámbitos. Lea más ideas de un socio creativo de la agencia de comunicación KesselsKramer.
Con base en Ámsterdam, Erik Kessels ha sido el socio creativo de la influyente agencia de comunicaciones KesselsKramer desde 1996, con oficinas en Ámsterdam y Londres. A lo largo de su destacada carrera, ha creado campañas icónicas para importantes clientes internacionales como Nike, Diesel, J&B Whisky, Oxfam, Vitra, Citizen M y I amsterdam. Conocido por su publicidad audaz y poco convencional, Kessels ha recibido numerosos premios internacionales por su trabajo.
Erik Kessels comenzó su charla enfatizando la importancia de cultivar un “espíritu amateur” en un mundo saturado de competencias de alto nivel y tecnología avanzada. Los profesionales modernos dominan rápidamente herramientas como la inteligencia artificial y los programas de diseño, pero Kessels argumenta que mantener la mentalidad de un principiante es crucial para una creatividad genuina. Aboga por la libertad de cometer errores, abrazar la ingenuidad y abordar constantemente los proyectos como si se experimentaran por primera vez. Este enfoque amateur, sugiere, no solo es refrescante, sino también fundamental para la innovación. Kessels señala su propio trabajo y su libro The Complete Amateur como testimonios del valor de comenzar de nuevo, promoviendo una ética donde la creatividad prospera no en la perfección, sino en abrazar lo impredecible y lo imperfecto.
Erik Kessels destacó la importancia de adoptar una mentalidad de principiante en el proceso creativo. Cree que abordar los proyectos con la ingenuidad de alguien que no sabe lo que está haciendo es vital para una innovación genuina. Aunque el trabajo final debe ser realizado con habilidad y precisión profesional, las etapas iniciales de generación de ideas deben mantenerse sin restricciones, impulsadas por la curiosidad y el juego. Kessels ilustró este concepto con un proyecto para una escuela holandesa que tenía problemas con la basura. En lugar de soluciones estándar, diseñaron instalaciones que hacían intencionalmente difícil deshacerse de la basura, lo que cambió positivamente el comportamiento. El concepto destacó que a veces la creatividad se encuentra evitando lo obvio y buscando ideas donde otros no miran.
El conferencista también compartió cómo encontrar inspiración en lugares poco convencionales puede generar nuevas formas de pensar. Citó el trabajo de Sam Barsky, un amateur que crea suéteres tejidos inspirados en los lugares que visita, como fuente de inspiración. Estas perspectivas inesperadas recuerdan a los creativos mantener un sentido de asombro y experimentación. También recordó sus propios proyectos, como una exposición fotográfica lúdica que animaba a los visitantes a interactuar e incluso saltar sobre las obras expuestas. Para Kessels, los momentos de sorpresa y desconcierto en el proceso creativo, donde su propio trabajo se siente inesperado o incómodo, son los más satisfactorios. Concluyó con un ejemplo de su proyecto 24 Hours in Photos, que recopiló casi un millón de imágenes de Flickr en un solo día. La exposición demostró cómo una abundancia de contenido visual puede usarse para desafiar las percepciones del público y envolverlo en experiencias lúdicas e inmersivas.